Me angustia pensar que todo acabó mal. Porque no se rectificó. Que de un puto error se creó otro más grande, y seguidamente otro hasta que el cúmulo de errores explotó. Se confesaron verdades ocultas que ya nos imaginábamos. A pesar de lo ocurrido, seguimos teniendo el mismo sentimiento que antes, pero se va frustrando a medida que frente a tus ojos se reflejan hechos que no esperabas. Decepción. Esa es la palabra, decepción. Una palabra que ni a mi me gusta pronunciar. Y verdaderamente me da pena pensar de ese modo, pero no se puede negar lo evidente. Creo que esa impresión la tengo al venir de una persona que me importa, que nos importa a todas. Doliéndome mucho, ya no puedo confiar, no puedo ni mirarla a la cara, no puedo hacer como si nada y comportarme como antes, no puedo.
Me he dado cuenta, ya varias veces, que no te puedes aferrar a etapas bonitas de tu vida, porque todos esos momentos, esos instantes, cambian. Y caen de uno en uno…
M. Cruz Lozano
Decepción un gran sentimiento para definir a esa persona con la qual confiavamos tanto ...
ResponderEliminarAferrate a la ley de la gravedad. Todo lo que sube baja. No hay viceversa.
ResponderEliminarDesde luego, pero tanto puede dar una vuelta como tres mil más y tirarnos a todos al suelo para volver a empezar, aunque creo que el destino seguiría llevándonos a todas a la misma orilla.
ResponderEliminarJúlia.
Nunca, nunca me lo imaginaba, en realidad, hasta me sabe mal, pero yo tampoco nunca podre volver a confiar nisiquiera mirarle a la cara, cuantisima razón maria..
ResponderEliminar